casoSinner, es ventisca en torno a lo sucedido con Jannik, que dio positivo y fue absuelto. El comunicado oficial es sensacional
Jannik Sinner, número uno del mundo en tenis, hace tiempo que no lo pasa bien. Primero la renuncia a los Juegos Olímpicos con polémica anexa, luego el positivo sin descalificación porque fue declarado inocente con razón. O mejor dicho: dejó claro a todo el mundo que era de buena fe y su rendimiento deportivo no se vio afectado.
En definitiva, siempre en el centro de la polémica. Y tras conocerse la noticia, varios ex colegas arremetieron contra él. Kyrgios, por ejemplo, puso poca fe en la crema; mientras que otros destacaron lo que consideraban un doble rasero. Un revuelo en pocas palabras, que no hace bien a nadie y mucho menos si puede hacer bien a un tenista que ya ha ganado un Slam y que en pocos días está a punto de vivir otro. Dicho esto, no faltaron los comentarios de quienes defendieron a Sinner y, entre ellos, está obviamente el presidente de FederTennis Binaghi. Quien, entrevistado por Lapresse, lo expresó así:
Caso Sinner, las palabras de Binaghi
«Pecador por encima de toda sospecha. No creo que nadie hubiera apostado por un posible caso de dopaje, hubieran apostado más por un atraco a un banco. ¿Las críticas de algunos tenistas? Vinieron de los más cretinos y frustrados, que fracasaron estrepitosamente».
Defensa a capa y espada y ataque rotundo a todos aquellos que se han atrevido a cuestionar la buena fe del campeón italiano. Quien, objetivamente, no ha hecho nada malo, también porque la cantidad de dopaje encontrada tras los análisis es algo verdaderamente irrelevante y ni siquiera tendría sentido perder todo lo construido hasta ahora por semejante tontería. En todo esto hay en cambio que examinar cuál ha sido el comportamiento imprudente de sus fisioterapeutas y qué ha llevado a esta sensacional polémica. Y como se ha dicho antes, quién sabe cómo será recibido por el público del Us Open dentro de unos días.