Dinamarca-Túnez, el gesto del defensa del Ferencvaros no podía pasar desapercibido. Ese «parecido» con el holandés de la Roma
No han pasado ni tres días desde el partido inaugural de Qatar 2022, que ya registramos la primera gran sorpresa de este atípico Mundial. La derrota de la Argentina de Leo Messi -entre las principales favoritas para la victoria final- en el primer partido contra Arabia Saudí es un resultado que pasará a la historia como uno de los más sensacionales. Y uno que difícilmente será olvidado. Un regreso sensacional, el de los Hijos del Desierto. Valientes, aunque antes del partido parecían las víctimas designadas contra los campeones albicelestes de Lionel Scaloni.
Después de encontrar la ventaja con un penalti marcado por el propio Messi, Argentina se convenció de que había puesto el partido en juego. Y entonces llegó la reacción que nadie esperaba. Primero el empate de Al-Shehri, luego el eurogol de Al-Dawsari que hizo estallar de alegría a los numerosos aficionados verdiblancos.
Dinamarca-Túnez, Laidouni exulta por… un desliz
Quizás ‘cargados’ por la histórica hazaña en Arabia Saudí, los tunecinos también saltaron al campo con el cuchillo entre los dientes en el desafío contra Dinamarca. Y lograron mantener el tipo frente a una de las selecciones más en forma del Viejo Continente, Dinamarca, que no pudo romper el cerrojo en la primera parte del partido. La «garra» con la que Túnez afrontó este partido fue evidente desde los primeros minutos. En este sentido, la exultación -en cierto modo exagerada- con la que se dirigió a su propia afición tras realizar una precisa entrada a un rival dio la vuelta a la web. Los que encendieron la televisión en ese momento imaginaron que Túnez acababa de marcar. En lugar de eso fue sólo un desliz…
así sin razón después de un minuto.
I LOVE HOLLY ❤️DenmarkTunisia pic.twitter.com/rMOvDeOK4j
– RiD ThE RoCk™️ (@RidTheRock) November 22, 2022
Un gesto que recordó a algunos la alegría del jugador de la Roma Karsdorp, ahora en total desacuerdo con José Mourinho, tras ‘ganar’ un saque de banda contra el Nápoles