Sinner, el tiroteo de San Siro ha dejado a todos sin palabras: Laura nunca estuvo allí, sólo tenía ojos para María.
Cuánta confusión se ha hecho, presa de la ansiedad de la primicia, en estas últimas semanas. Cuántas hipótesis descabelladas se han barajado, cuántas viejas noticias desempolvadas en la creencia de que seguían siendo relevantes. Nunca se había visto tal caos en torno a la situación sentimental de un deportista.
En el momento álgido del «interés» por Jannik Sinner, ni que decir tiene que todo el mundo rastreaba la web en busca de información sobre él. Y muchos estaban convencidos, hasta hace unas horas, de que el medallista de oro de la selección italiana estaba comprometido con una tal Laura Margesin. Una chica guapa y absolutamente a su altura, por Dios, pero que no es la novia del chico de San Cándido. Ni lo ha sido nunca, probablemente. Ambos habían sido vistos hace aproximadamente un año en el Super G de Cortina y eso bastó para que las sirenas del cotilleo entraran en acción.
La modelo, que desde hace algún tiempo vive en Miami, también es del Tirol del Sur. Por lo tanto, es probable que ambos sean amigos desde hace tiempo y que hubieran decidido ir al Super G sólo para pasar un rato juntos. También porque ese avistamiento no fue seguido por otros, ya que ella vive al otro lado del océano. Y quién sabe, quizá junto a ellos, pero al margen como siempre, también estaba la verdadera novia de Sinner. La histórica, la única que hasta ahora ha conseguido hacer latir su falso corazón de tipo duro.
Sinner, Laura Margesin nunca estuvo: él sólo tiene ojos para María
Cuando, el martes por la noche, las cámaras de San Siro se detuvieron en Jannik y la bella rubia que estaba sentada a su lado, las sirenas de los cotilleos dejaron por fin de sonar. Muchos se dieron cuenta al instante de que no había correspondencia entre las imágenes de la pequeña pantalla y lo que se escribía en la prensa.
Los menos informados pensaban que se trataba de la famosa Laura Margesin, pero no. Era María Braccini, que lleva saliendo con Sinner desde hace al menos un par de años. Su ruptura -debida, según dicen, a un post que la chica había publicado con motivo de su aniversario y que no gustó al tenista- fue sólo temporal. Volvieron a estar juntos unas semanas después y ella volvió a viajar por el mundo con él.
Sin embargo, no espere encontrar fotos de ellos juntos en las redes sociales, ya que es poco probable que Sinner acceda a la exposición mediática. De alguna manera, la aparición en San Siro se lo debía, aunque sólo fuera para restablecer cuál era la verdad y para que María «reivindicara» su condición de novia del campeón. Y ahora que se ha hecho justicia, tranquilos: pasará un tiempo antes de que volvamos a ver a Jannik en su compañía, reservado como es. Esto fue sólo una excepción.
