Las relaciones se habían agriado, pero por fin vuelve la paz: todo cambiará con el Us Open.
Hasta el año pasado, nadie había visto un torneo de Grand Slam en abierto en la pequeña pantalla. En cambio, la edición de 2023 del Us Open, como se recordará, había sido retransmitida íntegramente por SuperTennis, que se había hecho con los derechos del Major de Nueva York. Los aficionados, por tanto, habían podido disfrutar del espectáculo -y vaya espectáculo- de forma gratuita, después de años de visionado limitado a la televisión de pago.
Ese fue un momento histórico. Lástima sólo que, unos meses después, empezaran los problemas para el canal Fitp. La cadena y Sky, que posee desde hace tiempo los derechos de varios grandes torneos del circuito, siempre habían mantenido buenas relaciones, hasta el punto de «intercambiarse» los derechos de los 250 y 500. Una colaboración que funcionaba y parecía destinada a durar mucho tiempo, pero no fue así. Llegó un momento en que las relaciones se deterioraron.
En la mesa de negociaciones, según se dijo, se intercambiaron grandes palabras, porque la televisión de pago había exigido una suma muy elevada a cambio de la sublicencia de algunos torneos de la Atp y la Wta. A partir de entonces, la programación de SuperTennis se vio tangiblemente afectada. La cadena no pudo hacer más que retransmitir algunos torneos Challenger y partidos de pádel. Pero ahora, afortunadamente, lo peor parece haber quedado atrás.
SuperTennis: el Open USA como moneda de cambio
Un tuit de hace unos días ya había despertado esperanzas entre los aficionados al tenis, especialmente entre aquellos que no están abonados a Sky. Claudio Piazzotta, siempre bien informado cuando se trata de Fitp, había escrito que la televisión de pago y el canal de la Federación habían llegado finalmente a un acuerdo.
La noticia aún no es oficial, pero parece, efectivamente, que las partes han hecho las paces. Una primera pista en apoyo de esta tesis viene ya de los anuncios de SuperTennis, que al anunciar el Us Open hablan de exclusividad en abierto y no ya de exclusividad absoluta. Esto sugeriría que Fitp ha utilizado el Us Open, que finalmente se emitiría en simulcast, como moneda de cambio para obtener algo a cambio de Sky que le permita reponer su programación y hacerla más atractiva.
Obtendría, en concreto, los derechos de emisión de los torneos de la Wta (de los que Sky tiene la exclusiva desde el pasado enero), así como el archivo de las repeticiones de la Atp. Un primer paso, en definitiva, hacia la normalidad. Llegados a este punto, sólo queda esperar el eventual anuncio oficial de las partes implicadas, con la tranquilidad de los seguidores de Berrettini y Sinner, que podrán así disfrutar de algunos partidos antiguos de sus campeones favoritos.
