Tras su derrota en Cincinnati a manos de Rune, Berrettini dio un paso atrás: he aquí por qué los aficionados están preocupados.
Las expectativas, como era de suponer, estaban por las nubes. Matteo Berrettini acababa de ganar dos torneos seguidos y estaba tan animado que era justo esperar una gran actuación también sobre cemento. El hecho de que perdiera en la primera ronda del Masters 1000 de Cincinnati no significa que jugara mal, al contrario. En el primer set estuvo brillante y fuerte, sólo que no fue capaz de mantener ese ritmo y se vio desbordado en un momento dado por Holger Rune.
Al fin y al cabo, al cambiar de superficie es de esperar un poco de vacilación, sobre todo para un tenista que, como él, ha pasado tanto tiempo en boxes debido a diversas lesiones. Ya tendrá tiempo de resarcirse el campeón romano, que a estas alturas de la temporada sólo quería acumular el mayor número de puntos posible para ser cabeza de serie en el Us Open. Y evitar, como ocurrió en Wimbledon, toparse con los jugadores más fuertes del circuito desde las primeras rondas.
Será difícil, a estas alturas, que eso ocurra, más aún ahora que Berrettini ha anunciado un giro inesperado. Una noticia que ha preocupado a los aficionados pero tras la que, conviene subrayarlo, no se esconde ningún problema. Sólo, quizá eso sí, una pizca de comprensible decepción.
Berrettini en la cuerda floja: aún no se sabe
Según informa Il Tennis Italiano, el calendario de Matteo podría sufrir algunos cambios a partir de ahora. El actual número 42 del mundo debía participar en el torneo de Winston-Salem, pero es posible que decida saltarse la cita de Carolina del Norte
«Hace mucho tiempo que no juego sobre cemento, hay que adaptarse – fueron las palabras del finalista de Wimbledon 2021 cuando se le preguntó por los acontecimientos de agosto – Ha sido un verano muy ajetreado, muchos partidos. Todavía no he tomado una decisión sobre mi participación en Winston-Salem, tengo que hablarlo con el equipo. Evidentemente, lamento la derrota, pero eso no quita nada a los últimos meses positivos».
Y tiene toda la razón cuando dice que la derrota en Cincinnati no borra las cosas buenas que ha hecho en las últimas semanas. Matteo ganó 21 sets seguidos e incluso le robó el récord de ‘continuidad’ a Jannik Sinner, que lideraba esta clasificación. Todo se puede decir, en definitiva, salvo que, con Runa o sin ella, su verano no ha sido estratosférico.