Se despidió a los 38 años, una leyenda del deporte ha tomado una decisión de vida. Pero para los aficionados no tenía por qué darlo por terminado, y por eso sintieron un dolor verdaderamente desgarrador
Decidió dejarlo, darlo por terminado, a pesar de que probablemente su físico le hubiera permitido aguantar unos años más. Pero Sergio Rodríguez Gómez, de San Cristóbal de La Laguna, a sus 38 años ha dicho basta. Se ha retirado del baloncesto.
«Durante 21 años de su vida iluminó los parqués de toda Europa, y también de América. Ganó mucho, en España con su Real Madrid, en Rusia con el CSKA de Moscú y también en Italia con el Olimpia Milano. También ha sido protagonista al más alto nivel con su selección, con la que ha ganado medallas de todos los colores en Mundiales, Europeos y Juegos Olímpicos», escribe Sportmediaset, que hace un retrato de la sensacional carrera de este baloncestista que ha escrito la historia de las dos últimas décadas. Un jugador increíble.
Rodríguez dijo basta
Deja un legado increíble al deporte, Rodríguez. Chachismo. ¿Y qué es? ‘Es una religión para la gente que ama el baloncesto. Es una forma de vivir el baloncesto, con esa mirada curiosa y astuta que tiene un niño cuando se acerca por primera vez a este deporte. Y quiere aprender, crecer, mejorar, sorprender, ganar. Y entretener al público, divirtiéndose.
Carisma incuestionable fuera del campo que le permitió levantar tantos trofeos. Por supuesto, el mismo sentimiento también estaba dentro del rectángulo. Hizo historia, con jugadas sensacionales, con asistencias increíbles que se hicieron virales en las redes sociales en el último periodo y que dieron la vuelta a la televisión cuando ninguno de nosotros era consciente de lo que estaba a punto de ocurrir con el móvil en la mano. Deja un vacío entre sus seguidores, que sin duda le empujaron a continuar. Pero llega un momento en que es justo. Mejor cerrar sabiendo que lo has dado todo y no ir más allá. Que tengas una buena vida, Sergio Rodríguez.
