Pecador, este sí que le costó digerirlo: McDonald’s en mitad de la noche se le metió inevitablemente por la garganta.
Un maratón. Un auténtico tour de force. No hay otra forma de describir los últimos días deJannik Sinner El plusmarquista del Tirol del Sur ni siquiera pudo disfrutar de su victoria en el Erste Bank Open de Viena antes de que le llegara la hora de volver al circuito.
De Austria pasó a Francia, donde se disputa el último Masters 1000 del año en Paris-Bercy El número 1 de Italia sólo tuvo tres días para recargar las pilas, después de haber levantado al cielo la copa del Atp 500 anterior. Por tanto, partía, si se quiere, ya en déficit. Pero luego tuvo que contar, por si fuera poco, con un calendario totalmente descompensado que en el peor de los casos, por suerte eso no ocurrió, podría haberle penalizadofuertemente. Sí, porque su primer partido en la ciudad transalpina Sinner lo jugó en un
El reloj marcaba medianochecuando, por fin, él y su oponente, la estadounidenseMackenzie McDonald, fueron llamados al ring para dar comienzo a su esperado cara a cara. Fue un combate muy reñido que resultó ser Porque ya se sabe, para aligerar el ambiente y jugar con las palabras y el apellido de su rival, ‘darse un festín’ de bocadillos y patatas fritas a altas horas de la noche no es precisamente bueno para el delicado estómago de los campeones del Atp.
Sinner, qué maratón: amanece
Hicieron falta tres sets para domar al estadounidense, que se había venido arriba en la primera manga y había hecho temblar a Sinner y su equipo. No era tanto la derrota en sí lo que asustaba, sino más bien la perspectiva de un cuadro desfavorable en las próximas Finales de Turín
(AnsaFoto , Ilveggente.it)
Al vencer a McDonald, sin embargo, Jannik puso el sello a su cuarto puesto en la Race Esto significa que el peligro ha pasado y que no será colocado en la misma ronda que su vieja bestia negra, Daniil Medvedev, o uno de los Novak DjokovicCarlos Alcaraz Una ventaja nada desdeñable, en definitiva, que Sinner persiguió con acierto
A estas alturas, poco importa lo que ocurra en París. Y son muchos los que piensan que haría bien enretirarsey descansar un poco antes de que llegue la hora del torneo de Maestros. Sobre todo teniendo en cuenta el cansancio que sin duda sentirá tras la maratoniana noche en el Palais Omnisport. En el mejor de los casos, el azulse habrá acostado al amanecer Porque entre la cena y el tratamiento posterior al partido, la rueda de prensa y el subidón de adrenalina, habrá tardado al menos 5en acostarse. Sólo para volver a la canchadespués de exactamente 12 horassiendo su segundo partido programadohacia las 5de hoy. ¿Podrá él, nuestro héroe, mantener el ritmo
?